Los calabozos de Mérida sin climatización y con una plaga de mosquitos

La Unión Federal Policial (UFP) de Extremadura denuncia el estado de la planta baja y el sótano, donde se encuentran los calabozos de la Comisaría local de Mérida, por no existir climatización y como consecuencia producirse una plaga de mosquitos.

“Esto se debe a que a la hora de diseñar la Comisaría no han tenido en cuenta ese aspecto, ni el bienestar de detenidos ni de los propios funcionarios encargados de su custodia, careciendo de dicha climatización la zona de Precalabozos, Custodia y de Calabozos”, aseguran desde UFP.

Asimismo y en otro Área distinta existen cinco dependencias más, como son; dependencias Sindicales, Office de funcionarios y Pasillo principal. Estas disponían de aparatos individuales de climatización que permitían de alguna manera atenuar las altas y bajas temperaturas que sufrían tanto los detenidos como los funcionarios de custodia durante todo el año, dado los climas tan extremos de nuestra localización geográfica, en épocas de invierno se bajaba de los 4ºC y en épocas estivales de verano superan los 32ºC.

Pero desde principios de verano del año 2018 están averiados y sin visos de ser reparados, tal y como informan desde el sindicato.

Por otro lado, y como problema añadido a las circunstancias de no disponer de una adecuada climatización se suma una plaga de mosquitos, que se asienta en esas dependencias favorecidos por las altas temperaturas.

“Por lo tanto, funcionarios y detenidos, están soportando en esta época estival temperaturas muy por encima de los parámetros establecidos en el Real Decreto 486/1997, esto, unido a la existencia de los mosquitos, hace que la estancia en los calabozos resulte insoportable, además de encontrarse expuestos a riesgos que atentan directamente contra su salud”, subrayan.

Además, el sindicato también ha informado sobre la humedad existente en los calabozos desde 2011, como consecuencia de la ubicación y la falta de acondicionamiento.

Según informa UFP, estos problemas ya han sido expuestos en reiteradas ocasiones a la administración por esta Organización Sindical, sin que hasta el momento hayan dado una solución definitiva al mismo.

Esto supuso en 2016 algún que otro accidente laboral, provocando que algunos funcionarios tuvieran que ser asistidos clínicamente por picaduras de insectos en los servicios de Urgencias de los Hospitales de Mérida, teniendo que ser tratados con Urbasón y sometidos a controles clínicos ante posibles contagios de enfermedades.

Todo lo anteriormente expuesto incumple el Real Decreto 486/1997, de 14 de abril, por el que se establecen las disposiciones mínimas de seguridad y salud en los lugares de trabajo y el Real Decreto2/2006, de 16 de enero, en el que figuran las normas sobre prevención de riesgos laborales en la actividad de los funcionarios del Cuerpo Nacional de Policía.