Los inquilinos de viviendas sociales podrán comprarlas a través de préstamos “blandos”

La Junta de Extremadura firmaba esta mañana un convenio con el Banco Santander con el objetivo principal de facilitar préstamos hipotecarios para la compra de Viviendas de Promoción Pública a sus inquilinos.

De esta forma, según ha explicado el consejero de Sanidad y Políticas Sociales, José María Vergeles, los inquilinos de viviendas sociales que quieran comprarla podrán hacerlo en unas condiciones adaptadas a su situación.

Este mismo convenio también fue firmado con La Caixa y BBVA. Ahora se suma Banco Santander, por lo que estos inquilinos podrán optar por la entidad que deseen. Para ello, exigen como requisito tener una antigüedad de habitabilidad en dicha vivienda de más de 3 años.

Se trata de préstamos “blandos”. Estos beneficios son sencillamente un interés más bajo (del 3% en el caso del interés fijo, y del +2,5% en el Euribor) y créditos a 25 años. Cabe señalar que el precio medio de venta de las Viviendas de Promoción Pública (VPP) está en 33.000 euros.

Actualmente, la Junta cuenta con un total de 13.034 VPP. Teniendo en cuenta el número de habitantes de la región, Extremadura es una de las comunidades con más viviendas sociales de todo el país.

OBSERVATORIO DE LA VIVIENDA

Tras la implantación del Observatorio de la Vivienda en 2016, la Junta ha recibido varios estudios en los que se muestra que el 64,04% de los inquilinos de viviendas sociales estarían dispuestos a comprar estas viviendas, un dato que ha empujado aún más a la Administración regional a firmar este tipo de convenios con las entidades financieras.

Pero también, el Observatorio emite estudios sobre en qué situación están las familias inquilinas de las VPP, así como la situación de dichas viviendas. En algunos casos, este órgano recomienda que sean reformadas o el tipo de mejoras que pueden realizarse.

Durante el 2017, se consiguieron vender más de 200 VPP. El objetivo es llegar a ese 64,04% que marca el Observatorio, pero en cualquier caso, indica el consejero, “una venta supone un doble motivo de satisfacción”. En primer lugar, explica, “respetamos y facilitamos la decisión de las familias”, y por otro, “nos permite reinvertir ese dinero en nuevas viviendas sociales”.

En este sentido, Vergeles ha recalcado que su venta “no es un ingreso para la Junta de Extremadura, sino una forma de conseguir fondos para reinvertir en el mismo mercado”.