Detenidos tres huidos por delitos sexuales contra menores

El equipo de huidos de la justicia de la Unidad Central Operativa (UCO), ha detenido a tres personas a las que Estados Unidos reclamaba por cometer delitos sexuales contra menores de edad. 

Los detenidos (de 71, 23 y 55 años) estaban siendo buscados por el FBI estadounidense, que, en colaboración con la Guardia Civil, han llevado a cabo con éxito las investigaciones pertinentes para acabar deteniendo a los delincuentes sexuales. Los cuerpos de seguridad españoles han gestionado tres investigaciones diferentes. 

El primer detenido, de 71 años, formaba parte de una red criminal de intercambio de archivos multimedia de índole sexual de menores de edad, según informaciones del FBI. El citado servicio de seguridad estadounidense localizó en su ordenador una gran cantidad de archivos multimedia de contenido pedófilo, procediendo a su detención; tras esta, el detenido manifestó en su momento, que los había descargado “con fines de investigación”. Tras haber sido detenido en 2010, huyó a Honduras donde, después de evitar su extradición, acabó viajando hasta España. Los investigadores de la Guardia Civil acabaron encontrándolo en Getafe (Madrid) donde hacía vida normal hasta su detención. 

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El segundo de ellos, de 23 años, había sido acusado de amenazar y coaccionar a una menor a través de una conocida plataforma de mensajería, para la grabación de material pornográfico, que posteriormente el detenido llegó a comercializar. Los hechos ocurrieron en varias ocasiones, entre octubre del 2022 y enero de 2023, en el condado de Kalamazoo (Michigan) en Estados Unidos. El FBI se puso en contacto con la UCO de la Guardia Civil para su detención, y tras ello, los investigadores determinaron que el huido se encontraba cursando un Máster en Ciencia y Tecnología Cuántica en la universidad de Barcelona. 

El tercero de los detenidos, de 55 años, agredió sexualmente a su hijastra de 12 años en el 2014, quien quedó embarazada. Cuando la víctima dio a luz, las pruebas de ADN establecieron que su agresor era el padre, el mismo que había huido de los EEUU en dirección a España. 

Los investigadores de la UCO, en colaboración con el FBI, pudieron averiguar que, tras llegar a Barcelona, se dirigió a la localidad de Benidorm (Alicante), donde se estableció durante varios meses. Posteriormente la Guardia Civil verificó que se había embarcado rumbo a la isla de Gran Canaria, y fue detenido en la localidad de Vecindario.