Francia pasa y Argentina se hunde

El jueves dejó grandes momentos en el Mundial. Dinamarca tendrá pesadillas con el Var, Francia con la ley del mínimo esfuerzo ya está en octavos y Croacia le pasó por encima a Argentina.

El encuentro entre Dinamarca y Australia se saldó con un empate a uno. De nuevo el VAR fue determinante y los daneses estarán soñando con la tecnología una vez acabe la cita mundialista.

Se adelantó el conjunto europeo por mediación de Eriksen, el jugador con más calidad de los daneses, en el minuto 7 y comenzaron a poner entre las cuerdas al cuadro australiano que no sabía como parar los embites del conjunto de Hareide.

Cuando más lo necesitaba Australia, en una jugada a balón parado los de Oceanía pidieron penalti. Tras dos minutos de juego, Mateu Lahoz paró el partido para consultar el Var y decretó la pena máxima.

El encargado de transformarlo fue Jedinak que marcó su segundo tanto en la cita mundialista, segundo de penalti, para empatar la contienda. A partir del tanto fue Australia quien dominó el encuentro pero el resultado no se movió más.

Francia se enfrentaba a Perú con el objetivo de conseguir la victoria y amarrar la clasificación a octavos de final. Así lo hizo al ganar con un resultado ajustado de 1 – 0, que deja a los sudamericanos sin opciones.

El encargado de anotar el tanto galo fue Mbappe en el minuto 34, que se convirtió en el jugador francés más joven en anotar un gol en el Mundial. De esta manera desbancaba a Trezeguet.

Los peruanos despertaron en el ecuador de la primera mitad pero salvo un tiro lejano, que se topó con la cruceta, no inquietaron la portería de Lloris, que vivió un partido bastante plácido. Los americanos no han rendido al nivel que se les esperaba antes del Mundial.

El plato fuerte de la jornada llegó a las 20 horas. Se enfrentaban argentinos y croatas en un encuentro muy importante para el devenir del grupo D. Finalmente fueron los europeos quienes se llevaron el triunfo con un contundente 0 – 3.

Una irreconocible Argentina se paseó por el campo viendo el vendaval croata. Los de Sampaoli aguantaron la primera parte pero un gran error de Willy Caballero le permitió a Rebic, con una gran volea, adelantar a los suyos.

Messi estaba desaparecido, más pendiente del césped (lo mismo buscaba un billete de 500 euros) que del juego de su equipo. Parece que el penalti fallado con Islandia le ha hecho mella al del Barsa.

Si todavía había alguna opción para los argentinos apareció Luka Modric para disiparlas. Como mediapunta juega a la perfección y lo demostró durante todo el partido. Suyo fue el segundo tanto, un auténtico golazo.

La puntilla definitiva la puso Rakitic. Con los argentinos ya derrotados recibió un balón en el interior del área y, a placer, empujó el balón al fondo de la red.

Esto deja a los argentinos contra las cuerdas, que tendrán que esperar resultados para saber si tiene opciones de clasificarse para los octavos de final del Mundial.