IU impugna las bases para el puesto de cocinero en la escuela infantil de Mérida
16 de Julio de 2018
Izquierda Unida Mérida ha presentado ante la delegación de personal un escrito de impugnación de las bases de convocatoria para la selección de un puesto de cocinero de la escuela infantil, por vulneración de los derechos de los aspirantes al puesto.
Según la formación, la redacción de las bases para la cobertura de esta puesto “vulneran” los derechos de los aspirantes debido a que “no respetan los plazos mínimos impuestos por la legislación vigente para la subsanación o las correcciones que, en su caso, debieran realizar los aspirantes sobre la documentación presentada”, señalan.
Así, mientras el plazo establecido para la subsanación de las solicitudes, la normativa vigente es de 10 días, el plazo señalado en las bases para que los interesados puedan subsanar los errores de sus solicitud, o aportar la documentación que no facilitaron en su momento es únicamente de 2 días, lo que puede provocar situaciones evidentes de indefensión, y perjudicar su derecho a la libre concurrencia.
“El carácter tan limitado de estos plazos no solo es manifiestamente ilegal, sino que además puede impedir el derecho de los aspirantes al acceso del empleo público”, indican desde IU.
Así, “podemos encontrarnos con situaciones en las que los candidatos más idóneos al puesto sean excluidos del proceso por el mero hecho de haber cometido un error y no haberlo subsanado en un plazo de dos días, sobre todo cuando la administración municipal no dispone de ningún sistema de notificación electrónica por el que los interesados puedan conocer en el momento las incidencias del proceso, salvo que continuamente se obliguen a consultar la web institucional del ayuntamiento”.
IU recuerda que ya comunicó a la delegación de personal todas las incidencias que son sujeto de esta impugnación en el momento en el que se les facilitó el borrador de las bases para nuestra consideración, por lo que a su juicio, esta circunstancia adquiere aún mayor relevancia.
Por ello, entienden que la actuación de la delegada de personal es el reflejo de una actitud en la que el respeto a los derechos de los aspirantes y a la legislación vigente “no están presentes entre los principios que rigen los procesos de selección en el Ayuntamiento de Mérida”.
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