La Junta reacciona por fin y suspende a la directora acusada de maltrato a una niña autista

La Consejería de Educación y Empleo, de la Junta de Extremadura, que encabezan la consejera Esther Gutiérrez y Rafael Rodríguez de la Cruz, como secretario general, suspende a la directora del colegio cacereño acusada de maltratar a una niña con problemas de autismo.

La suspensión tiene carácter cautelar y llega, por fin, después de que Ana Belén Salas, la madre de la alumna, cansada de hacer reclamaciones ante la Administración por el maltrato que estaba sufriendo su hija, introdujese una grabadora en la mochila de la niña para averiguar lo que le estaba ocurriendo en el colegio a la pequeña.

Las grabaciones de varios días -2, 3 y 4 de mayo- convencieron a la mujer de que el comportamiento de su hija cuando llegaba a casa –llanto, rabia, se tiraba al suelo al no poder expresar lo que le ocurría- era la consecuencia de la violencia verbal y física a la que estaba siendo sometida por la propia directora del centro, el colegio de Educación Infantil y Primaria San Francisco, situado en la Ronda de San Francisco de la capital cacereña, al que la niña asiste desde el año 2010.

Tanto la madre como su abogado afirman que en las grabaciones se escucha a la directora dirigiéndose a la menor con unas palabras y en un tono que indican claramente una situación de violencia verbal y física.

LA NIÑA CASI NO HABLA

La chica tiene 13 años y padece un ‘trastorno del espectro autista’, lo que se suele denominar TEA y, según su madre, sólo pronuncia una docena de palabras.

La mujer, que además preside AFTEA (Asociación de Familias de Personas con TEA) de Cáceres, empezó a sospechar en el 2017 que algo le estaba ocurriendo a su hija en el colegio. Además del comportamiento inusual cuando llegaba a casa, la muchacha regresaba al hogar familiar con moratones -la madre habla también de tirones de pelo-, que parecían haber sido ocasionados por golpes o pellizcos.

Ante la falta de reacción y de respuesta de la Junta, la madre puso el caso en conocimiento de la Justicia. La denuncia se basa en un presunto delito continuado de malos tratos "físicos y psíquicos, vejaciones y amenazas veladas".

El caso está en el juzgado número 7 de Cáceres. El abogado de la familia, Ángel Luis Aparicio, ha declarado que las grabaciones han sido admitidas como pruebas por la Justicia y que se pretende que la Policía las limpie para que se escuchen mejor las palabras de las personas implicadas.

REACCIONA POR FIN

Ahora, como no podía ser de otro modo, en vista de la repercusión policial, judicial y social que está teniendo el caso, y mientras que no concluyan las investigaciones de la propia Junta y el proceso penal en tramitación, la Consejería de Educación y Cultura reacciona suspendiendo, con carácter cautelar, de sus funciones tanto docentes como directivas a la directora del centro. Con el fin de que no tenga contacto con la víctima.

Tanto la madre como su abogado afirman que en las grabaciones se escucha a la directora dirigiéndose a la menor con unas palabras y en un tono que indican claramente una situación de violencia verbal y física.

La Consejería de Educación y Empleo de la Junta de Extremadura también está investigando lo ocurrido para aplicar las sanciones correspondientes si se ha producido alguna actuación irregular en el centro educativo.

No obstante, la madre afirma que la Junta de Extremadura no reaccionó de forma adecuada cuando ella le comunicó sus sospechas de malos tratos. No hubo respuestas a sus escritos por parte de la Junta y la directora del centro le dijo que no había problemas con su hija pues la niña era un encanto.

Ahora, el caso ha llegado al Juzgado y la Junta de Extremadura sí tendrá que responder ante las responsabilidades en las que pueda haber incurrido el profesorado del centro y su propia inoperancia para hacer frente al maltrato.