La Unión Europea estudia relajar el uso de la mascarilla y el distanciamiento

La Unión Europa comienza a plantear la relajación de algunas de las medidas que obligó a implantar el COVID para proteger a la población, tales como el distanciamiento físico y el uso de mascarillas.

Así lo informa el Centro Europeo de Control de Enfermedades, que enumera algunas orientaciones para adaptar las medidas entre personas, hogares o burbujas sociales como consecuencia del cambio que está trayendo consigo la vacunación.

"Cuando los individuos totalmente vacunados se reúnen con otros individuos totalmente vacunados, el distanciamiento físico y el uso de mascarillas pueden relajarse", explica el ECDC. A su vez añade que, en caso de encontrase con personas no vacunadas, las medidas podrán aliviarse "siempre que ninguno de los presentes tenga un factor de riesgo de enfermedad grave".

En cambio, la mascarilla y el distanciamiento deberá seguir manteniéndose en los espacios públicos y en las grandes reuniones "independientemente del estado de vacunación de las personas". A su vez, estas nuevas recomendaciones pueden afectar a los requisitos de las PCR y las cuarentenas para viajar. Según el comunicado "en algunas situaciones (...) pueden eximirse o ajustarse para los individuos totalmente vacunados"; además, las autoridades sanitarias podrán considerar la posibilidad de que las personas vacunadas no tengan que repetir la prueba en los entornos laborales.

Andrea Ammon, directora del ECDC, define como “alentador” que, gracias a los efectos de la inmunización, se pueda evaluar y permitir la relajación de las medidas, pero advierte de que "debe hacerse gradualmente y basarse en una cuidadosa evaluación de los riesgos que conlleva".

Finalmente, Ammon añade que confían “en que el aumento de la cobertura de vacunación tendrá un impacto positivo y directo en la vuelta a la vida normal".