La vida se abre paso en la cacereña ‘Sierrilla’ tras el incendio de 2017

Una treintena de voluntarios de la asociación Natura 2000 han sembrado esta mañana de domingo, 1 de diciembre, un centenar de plantones de encina y otras tantas bellotas, en terrenos municipales de la zona más alta de ‘La Sierrilla’, en el inicio de la cañada real Cáceres-El Casar.

La zona sufrió un incendio a principios de agosto de 2017 que deforestó un par de hectáreas donde aún son visibles los esqueletos calcinados de numerosos árboles. Pese a que la actividad comenzó bajo una tenue lluvia, el resto de la mañana despejó, llegando incluso a permitir que luciera a ratos el sol durante buena parte del desarrollo de la actividad.

Los voluntarios de Natura 2000 colocaron protectores y guías a la mayor parte de los plantones para facilitar la protección de los mismos, en un paraje natural, que en los últimos tiempos se ha convertido en una vía usual de ciclistas y senderistas que recorren los apenas 10 kilómetros que separan Cáceres y El Casar.

Para Natura 2000 “el compromiso contra el cambio climático pasa, más allá de grandes cumbres, por la realización de actuaciones individuales como plantar árboles o clasificar diariamente la basura en los hogares, más allá de los postureos políticos y sociales a los que estamos acostumbrados”.

En los últimos años los alrededores de la ciudad de Cáceres han sufrido paulatinamente los incendios forestales durante la época estival, especialmente La Montaña, el cerro de los pinos en Aldea Moret o la propia Sierrilla.

Con este gesto la asociación Natura 2000 pretende concienciar a los cacereños sobre la necesidad de proteger los espacios naturales aledaños a la ciudad y regenerar los mismos en el caso de que sufran atentados, como incendios forestales.

Natura 2000 ha colaborado, junto a otras entidades como Amigos de la Ribera del Marco, A.R.B.A. Extremadura o la Universidad popular de Cáceres, en distintas actuaciones encaminadas a la protección y recuperación del medio ambiente en la ciudad de Cáceres, como la limpieza de Fuente Concejo en febrero de este año, Fuente Fría, el pasado 26 de octubre, o una repoblación en la ribera del Marco, cerca de la actual ubicación de la ronda sur, en marzo del año pasado.