Los minutos de descuento borran la sonrisa de la parroquia pacense

El Club Deportivo Badajoz tampoco logró a la tercera su primera victoria en el estadio Nuevo Vivero. Un tanto de El Ejido en el descuento borró la sonrisa de la parroquia pacense. 

Los primeros minutos fueron de tanteo para ambos equipos. Ninguno quería cometer errores que le sacaran desde un principio del partido.

Corría el minuto 10 cuando el conjunto pacense gozó de la primera ocasión de gol. Guzmán Casaseca se fue de su marcador y cedió para que Francis Ferrón, de primeras, ensayó el disparo que finalmente se fue alto por poco.

Tras un desbarajuste defensivo, Kike Royo tuvo que ponerse la capa de héroe para salvar al Badajoz. Un robo cerca de la frontal del área se tradujo en una jugada de peligro de los andaluces.

Los blanquinegros se adelantaron en el marcador en el minuto 21. David Martín se sacó un centro de la chistera que acabó en la cabeza de Francis Ferrón, que superó por alto al cancerbero rival. El killer del Badajoz no faltaba a su cita con el gol.

Tras el tanto los jugadores almerienses se lanzaron al ataque en busca del empate, pero los pacenses se mostraban muy seguros en defensa para alejar cualquier ocasión de peligro.

En el minuto 30 el colegiado decidió parar el partido para que los jugadores se tomarán un descanso y un refrigerio ante el intenso calor que estaba haciendo en la tarde pacense.

La conexión Guzmán - Ferrón estaba haciendo mucho daño a la defensa almeriense y en el minuto 35 lo volvió a demostrar. El centrocampista la puso para que el delantero, desde el pico del área intentará superar al cancerbero con un disparo colocado que se marchó alto por muy poco.

Tuvo Guzmán en sus botas el segundo para los pacenses. Corría el minuto 41 cuando David Martín filtró un balón entre líneas que dejó al blanquinegro solo contra el portero, pero no logró definir bien y el balón, tras una gran mano del cancerbero, se alejó del área almeriense.

SEGUNDO TIEMPO

No habían pasado dos minutos de la reanudación cuando los almerienses gozaron de la ocasión más clara del encuentro. A bocajarro tuvo que salvar Kike Royo un disparo que se colaba en el interior de la portería.

Higón se estaba mostrando muy participativo durante todo el encuentro. Era el dueño de la banda derecha blanquinegra y en el minuto 50 pudo anotar el segundo para su equipo pero Aulestia estuvo muy atento para detener el balón.

En el minuto 56 debutaba por fin Kamal. Patrícia Salinas le daba la alternativa al futbolista blanquinegro, que salió al terreno de juego en sustitución de Javi Alonso.

Tras varios minutos donde el Ejido era el equipo que dominaba el balón apareció Higón para hacer el gol de la tranquilidad. Guzmán cedió al interior derecha para que este con un disparo raso, y con ayuda de un defensor, batiera a Aulestia.

Los aficionados blanquinegros no habían terminado de celebrar el gol cuando el colegiado decretó penalti a favor de los almerienses. A punto estuvo de pararlo Kike Royo, que en un primer momento pudo evitar el tanto pero con el rechace no pudo. De esta manera los andaluces volvían al partido.

En el minuto 75 el colegiado de la contienda volvió a detener el partido para que los jugadores bebieran a causa del intenso calor. Había que aguantar el marcador como sea.

El conjunto blanquinegro necesitaba frescura para tener más oportunidades arriba. Por ese motivo Patxi Salinas dio entrada a Cristian Pérez, en sustitución de José Higón.

A falta de ocho minutos para el final se formó una tangana junto al banquillo del Club Deportivo Badajoz. Un problema entre un jugador de El Ejido y un recogepelotas pacense fue el detonante de la trifulca que acabó con varios expulsados del banquillo almeriense.

Con el tiempo ya cumplido Patxi Salinas decidió hacer el tercer cambio. Dio salida a Francis Ferrón, que se marchó ovacionado, y en su lugar ingresó en el terreno de juego Ezequiel Lamarca.

El colegiado dio 7 minutos de descuento por los patrones que se habían producido durante el partido y el Badajoz supo sufrir para amarrar los tres puntos y dar una alegría a su afición.

Gúzman pudo sentenciar el encuentro en el descuento pero no supo definir frente Aulestia y el balón acabó siendo despejado por un defensor.

Cuando todo parecía que iba a ser la primera victoria del Badajoz en el Nuevo Vivero, El Ejido logró empatar la contienda y continuar con el gafe de los blanquinegros en su campo.

Con este empate a dos la afición blanquinegra y los jugadores se quedaron con la miel en los labios. Habrá que esperar a otra jornada para ver la primera victoria pacense en su casa.