¿Qué va a pasar con el transporte sanitario extremeño? Así está la situación

El transporte sanitario extremeño corre peligro y su futuro es incierto. La Asociación Empresarial (ATRANSANEX) que negocia con los sindicatos el nuevo convenio para mejorar las condiciones de los trabajadores ha decidido no asistir a la reunión de este viernes y las conversaciones para llegar a un acuerdo han quedado bloqueadas.

7Días ya explicó el jueves los motivos de la decisión de ATRANSANEX. El representante de esta patronal, Eduardo Guardado, ha asegurado a este medio que las organizaciones sindicales habían convocado un escrache cuando llegaran a la Fundación de Relaciones Laborales de Extremadura y eso podría poner en peligro su integridad física.

Hay que recordar que todo esto ocurre tras la sentencia del Supremo, que obliga a modificar drásticamente el convenio en Extremadura y todo el sistema diseñado hasta ahora. Así, la mayor parte de los trabajadores pasarían a trabajar 1.800 horas y no 2.700 como estaban haciendo algunos, suponiendo cobrar unos 400€ menos todos los meses.

La empresa que actualmente se encarga del transporte sanitario en la región, Ambuvital, aseguró hace unas semanas que la mayor parte de los empleados no estaban conformes con este cambio. Y así se vio reflejado en las últimas manifestaciones que se convocaron por los sindicatos a las que, según esta empresa, no iba nadie y que acabaron siendo un “fracaso absoluto”.

Además, UGT ha decidido abandonar la negociación y ahora solo quedan tres frente a ATRANSANEX: USO, CCOO y CSIF. Dejando de lado las 1.800 horas –algo que ya han conseguido- en este momento lo que importa es la firma del nuevo convenio que deberá cumplir la próxima empresa que se haga cargo del transporte. En el presente sigue vigente el contrato de emergencias de Ambuvital hasta principios de 2023.

Lo que propone la patronal es una subida de los salarios del 11%, muy alejado del 35% que exigen los sindicatos para llegar a un acuerdo y que “se acerque a la media nacional”. Desde ATANSANEX dejan claro que llegar hasta ese porcentaje es algo imposible de cumplir, ya que no es viable para ninguna empresa y, según indica Eduardo Guardado, lo acabarían pagando todos los extremeños. Aun así, para las organizaciones sindicales parece ser una línea roja y difícilmente cambiarán de opinión.

LO QUE EXIGEN LOS SINDICATOS

Como puntos principales piden la subida del salario para acercarse como mínimo a la media nacional, el mantenimiento de los complementos por sistema de trabajo en guardias o la fijación de turnicidades “que hasta ahora no se retribuyen específicamente como tales”.

Guardado expresa a 7Días que “la situación está más bloqueada que nunca” y, de nuevo, solo queda esperar para tener más noticias sobre el futuro de este servicio público.