“Que intenten bajarnos en el campo, porque el club aún debe 3.000.000 € y lo vamos a pagar”

El CD Badajoz cumplió el sábado con su afición y le brindó una victoria para llevarse los tres puntos ante el Azuaga después de una remontada. El entrenador de la plantilla, Luis Oliver, vio un partido “muy igualado contra un equipo muy físico”.

“Dos resbalones y un tiro perfecto han hecho que nos pongamos por detrás y tener que remontar. Por suerte, hemos empatado antes de terminar el primer tiempo y eso al final nos ha dado alas para rematar en la segunda parte y luego aguantar el resultado. Hoy se ha sabido sufrir, así que encantado”, ha expresado.

LA SITUACIÓN INSTITUCIONAL

En la rueda de prensa posterior al partido, fue preguntado por la situación que atraviesa la entidad. En las últimas 48 horas se ha hablado mucho sobre el escenario económico y Oliver ha sabido despejar bien las dudas.

“En ningún caso vamos a desaparecer”, ha quedado claro a la par que ha recordado que el club debe “más de tres millones de euros” y que “si hacemos paquetitos de problemas de 300.000 euros, tranquilos que quedan unos 14 escándalos más”.

Oliver ha afirmado que “tenemos la desgracia de que hay gente regular con acceso a la información del caso y buenos voceros y estómagos agradecidos dispuestos a soltarlo a la primera de cambio. Hay gente que tiene que hacer lo posible para bajarnos. El que nos quiera bajar en los despachos lo lleva claro. Que lo intenten en el campo y a ver qué tal”.

En este sentido, ha recordado que cualquier acreedor puede reclamar dinero, pero que los pagos irán haciéndose cuando sea conveniente. Su familia -que es la que dirige el club- sabe que en dos años tendrán 3.000.000 euros menos en la cuenta y tendrán que apechugar con ello.

“El club económicamente no es viable, pero el propietario pone el dinero que haga falta y al final se llega a todo. Por eso hemos equilibrado el presupuesto este año y hemos hecho un equipo sostenible. Lógicamente, si no hubiese alguien que pusiera el dinero, esto no se sostendría, tendríamos que jugar con jugadores gratis y hacer 10.000 abonados para hacer frente a los pagos”, ha añadido.

LA AFICIÓN DESCONFÍA DE LA PROPIEDAD

Cuando saltó la noticia de los impagos a la Seguridad Social, la afición saltó de inmediato y puso en duda de nuevo el proyecto. Esto es algo que a Oliver no le preocupa. Ya lo sufrió la pasada campaña y sabe que seguirá siendo así.

“Yo les hablo claro, el 70 % de los jugadores ya me conocían antes de venir aquí. Ya saben que vienen a un club con muchos problemas, que sus sueldos van a tener que ponerlos alguien como ampliación de capital porque todo lo que generamos es para pagar deudas”, ha agregado.

Ve muy importante “el perfil psicológico” de los futbolistas y los ha elegido conscientemente: “Les he avisado que este tipo de noticias y situaciones se van a dar. El que no esté capacitado para aguantarlas no puede estar aquí y todos han aceptado”.

El entrenador ha mantenido que “estos chicos juegan por algo más que por un sueldo, juegan por una ciudad entera, por sus familias, y a la hora de la verdad no les van a dejar mal”.