Un Multiusos abarrotado disfrutó de un épico España - Brasil

España y Brasil honraron al fútbol sala y protagonizaron un partido tremendo, para nada amistoso, en Cáceres. Terminó 2-2 quedando el sabor agridulce de que los de Fede Vidal ganaban por 2-0 a seis minutos del final.

Cada uno con sus armas salieron con el pecho descubierto a ganar el desafío. El arranque del partido no pudo tener mayor carga de emotividad. Paco Sedano, 'La Muralla', jugaba su último partido bajo palos.

Había mucho toro enfrente, un Brasil que venía de asolar a la Portugal de Ricardinho, sin embargo, los españoles llevaron la iniciativa. Probó Adolfo a Guita, que estaba bien puesto. Con una intensidad bestial España paró como pudo las embestidas cariocas.

Si bien un larguero de Pito puso en vilo al pabellón y casi al protector del VAR, los hombres de Fede Vidal apenas sufrieron con el juego posicional de su adversario.

La ocasión más clara de los de Marquinhos en la primera parte fue obra de Xavier que llegó en una pérdida peligrosa que Dieguinho, con todo a favor, mandó al poste de Jesús Herrero.

Desde ese sobresalto España mandó en todo. Raúl Campos, con una movilidad tremenda, dio un aviso y después de que Pola provocase dos faltas en la misma arrancada, llegó el 1-0 en una combinación entre Lin y Campos, que hizo una pared de crack para plantar al segoviano ante Guita. Chutó al poste y envió a cámara lenta la pelota a las mallas. El Multiusos de Cáceres se vino abajo.

Se despidió La Muralla Paco Sedano y Jesús Herrero le hizo el mejor homenaje de todos con un soberbio partido, con paradas inverosímiles.

Daba la sensación de que se mascaba el empate. Pero España también tiene sus individualidades. Tras una doble parada de Guita, la última a Sergio Lozano, Rafa Usín cazó pieza y Aicardo rozó el tercero.

El Pabellón se caía, pero Dyego y Ferrao hacían volar a Herrero y, de repente, llegó el 2-1 en una acción inesperada. Dyego lanzó a Brasil, pero el que estaba 'on fire' era Pito, que se marcó el jugadón del empate.

El mejor de los que se vistieron de corto, pegó una arrancada tremenda sin que nadie le derribase porque era la sexta. Conectó con Gadeia y marcó el 2-2.

Eso sí, España quería ganar. Rafa Usín amenazó a Guita, que quitaría la gloria a Miguelín a un minuto del final. Ambos equipos acabaron con portero-jugador buscando el triunfo.