Violencia de género en Extremadura: 130 mujeres acogidas y 600 órdenes de protección

Casi 1.300 mujeres acudieron el año pasado (2018) a los puntos de atención psicológica de Extremadura, donde se han emitido cerca de 600 órdenes de protección, y en la que 130 mujeres, y las personas menores a su cargo, han sido acogidas y acompañadas en los espacios de las casas de la mujer de Cáceres y de Badajoz.

Son cifras dadas por la consejera de Cultura e Igualdad, Leire Iglesias, con motivo de la inauguración de la jornada ‘La violencia de género desde el ámbito de la Policía Local’. Al acto también han asistido la consejera de Medio Ambiente y Rural, Políticas Agrarias y Territorio, Begoña García, y la delegada del Gobierno en la región, María Yolanda García Seco.

Durante el acto inaugural, la consejera de Medio Ambiente y Rural, Políticas Agrarias y Territorio ha presentado una guía de actuación de la Policía Local de Extremadura ante casos de violencia de género.

Según la consejera, se trata de una guía “sencilla pero completa”, que pretende ser una herramienta para ayudar a la Policía Local en su trabajo diario, así como un documento para responder a las peticiones de ayuda, y para detectar situaciones de riesgo.

Ha destacado, además, la reciente aprobación de la ley de coordinación de las Policías Locales en Extremadura, en la que se dedica, a su juicio, “esfuerzos a la formación, a mejorar los conocimientos y destrezas profesionales para frenar, y a ser posible detectar y prevenir, el ‘drama’ de la violencia de género”.

“La lucha contra la violencia de género debería ser una obsesión para toda una sociedad, porque supone la frontera entre el avance o la barbarie de una sociedad y esa frontera entre la convivencia y el salvajismo no admite a neutrales”, ha enfatizado Begoña García Bernal.

Y 190 AGRESORES, EN PRISIÓN

En las cárceles extremeñas hay actualmente 190 personas encarceladas por delitos de violencia de género, “pero la sociedad conoce mucho más de las víctimas que de sus agresores”, afirma la delegada del Gobierno.

“Es necesario que el conjunto de la sociedad rechace contundentemente el comportamiento del agresor, que sean señalados con el dedo por su entorno más cercano; ese que conoce o que intuye que se están produciendo agresiones y que mira hacia otro lado. Ahí tenemos que incidir como sociedad, en desechar esos comportamientos”.

“Hay otras víctimas de la violencia de género a los que debemos prestar atención: los hijos e hijas que viven un calvario en sus casas y que son los más indefensos. Tenemos que detectar estas situaciones y actuar de forma coordinada para crear a su alrededor un entorno de protección que les deje crecer felices”, opina Yolanda García Seco.