“Cuando Extremadura esté bien comunicada, seremos una de las regiones más potentes”

Gonzalo Martín Domínguez, extremeño natural de San Martín de Trevejo, lleva la cultura extremeña allá por donde pisa y ahora lo hace desde Sevilla, donde preside la Casa de Extremadura.

Desde esta ciudad andaluza, a sus 77 años, continúa luchando por unir a extremeños y andaluces para que allí conozcan nuestros productos, y, cómo no, para que la cultura regional sea acogida por el resto de sevillanos.

7Días ha entrevistado a este entrañable extremeño que ha sido galardonado con la Medalla de Extremadura, el mayor reconocimiento regional existente en la actualidad.

¿Cuál es la función de la Casa de Extremadura en Sevilla?

Nuestra obligación es dar a conocer más y mejor la región. Tenemos que desterrar viejos tópicos y mostrar lo mejor de Extremadura, porque aquí otras cosas no, pero cosas buenas tenemos muchas.

Somos los mejores portavoces que gracias al cariño por su tierra mostramos al resto los encantos que hay en ella. Yo estoy orgulloso de haber nacido en ella, y por supuesto de que mis hijos vuelvan allí encantados.

¿Qué tipo de actividades realizáis?

Infinidad de actividades a lo largo del año. Por cercanía, ahora el próximo día 8 de septiembre (Día de Extremadura) tenemos un desayuno gratis de migas con chocolate junto a la Giralda, que es donde está la sede de la Casa de Extremadura en Sevilla. 380 metros cuadrados disponibles para todos los sevillanos que se interesen por Extremadura, así como para los extremeños que allí residen.

Por la tarde, ese mismo día, la hermandad de Guadalupe paseará a su Virgen con un gran paso. Es la única hermandad que aparece en septiembre en Sevilla. Con ello queremos destacar que Guadalupe es nuestra tierra, aunque sin embargo la tutoría eclesiástica sigue en la Archidiócesis de Toledo. Y es que hemos pedido muchas veces su pertenencia.

Luego también montamos stand por donde pasan más de 50.000 personas. Todas las casas regionales de Sevilla se instalan ahí para mostrar los productos de cada región, y como no podía ser de otra manera, Extremadura está presente.

Otra de las actividades que solemos realizar son excursiones. El 29 de septiembre nos vamos a Antequera. También hay charlas culturales, exposiciones, representación de libros. Acercamos la navidad extremeña a los sevillanos.

Por supuesto, no podían faltar la degustación de vinos y licores extremeños, así como excursiones a distintas localidades de Extremadura o la tradicional matanza extremeña en enero.

En la gran feria de Sevilla tenemos una caseta, que aunque es pequeña, no queremos que ningún extremeño se la pierda. Recibimos también a asociaciones y grupos regionales, y les acompañamos a visitar la ciudad así como paseos en barco por el Guadalquivir.

Tenemos una gran biblioteca de la cual presumimos, y en San Valentín creamos una campaña para dar un premio a aquella persona que destaque por su amor a Extremadura.

¿Sabe cuántos extremeños hay allí?

Cerca de 40.000.

¿Por qué cree que emigran los extremeños a tierras sevillanas?

Sevilla nos quiere. Ser extremeño en Sevilla es muy fácil, es más difícil ir a Cataluña, País Vasco o Madrid.

Los sevillanos siempre nos han recibido muy bien, por eso, en busca de un futuro mejor, muchos extremeños optaron por esta ciudad. Eso sí, en cualquier profesión, Extremadura ha sabido estar.

Y es que,Sevilla es una ciudad abierta donde las culturas siempre han convivido sin problema. Aquí todo empresario que llega es bien recibido. Además, ya nos van conociendo mucho. Muchos ciudadanos optan por Extremadura como destino turístico.

¿Qué oportunidades ofrece Sevilla que actualmente no podemos encontrar en Extremadura?

Sevilla ofrece muchas cosas porque es una ciudad mundial, por eso nuestros productos están aquí. Cuando entro en tiendas y veo mis productos me alegro. El mercado de nuestros vinos cada día se extiende más por el mundo y cada vez se aprecia más en Sevilla.

Por eso hay que aprovechar los momentos de las dos regiones, que siempre han tenido circunstancias muy parecidas. Pero sí que es verdad que esta ciudad ofrece mayor oferta de empleo.

¿Cree que la falta de conexión ferroviaria o aérea merma el crecimiento de la región?

Claro que sí. Cuando Extremadura consiga unos buenos medios de comunicación, seremos unas de las regiones más potentes de España.

Nosotros nos unimos al clamor porque es lo que le falta a Extremadura. Hay que luchar por el ferrocarril y denunciar que el tren nos deja parados en mitad del campo. Eso no se puede tolerar, porque no hay ninguna región de España en la que esto ocurra.

En Galicia hay grandes vías de comunicación, enormes pasos peatonales, hoteles… ¿Por qué Extremadura no lo puede tener? Si le hemos dado siempre todo a España.

Muchos productos emanan de aquí, y eso hay que decírselo a la gente. Que cuando se comen un tomate, sepan que es de Extremadura, que el corcho es de aquí, que muchos vinos son de aquí... Y eso es lo que hacemos desde esta Casa Regional

¿Se llevan bien extremeños y sevillanos?

Si. La relación es muy cercana. Yo cuando vine todavía encontraba a hombres de tierra de barros cargados de botijos. Un día recordamos a esos hombres con una exposición. De allí nos siguen mandando cerámica, así como vinos y productos derivados del cerdo.

Estamos calladitos pero dando mucho de sí. Tenemos que elevar nuestros valores, creernos que somos capaces de mucho más. Cuando los empresarios extremeños logren estar a la altura del resto, entonces nos daremos cuenta del gran potencial que teníamos escondido.

¿Qué sentiste cuando te enteraste de que serías galardonado con la Medalla de Extremadura?

Lo venían pregonando amigos, ayuntamientos y partidos políticos. Yo he luchado mucho por el hermanamiento de Extremadura y Sevilla, he trabajado siempre desde el anonimato, nunca quise reconocimientos. Ahora me viene este galardón de mi tierra, y por supuesto, me siento orgulloso de él y lo comparto con todas las casas regionales: con San Martín de Trevejo, la Algaba, Badajoz, Cordobilla de Lacara…