Operación contra el uso de artes prohibidas para la caza

El Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil de Herrera del Duque ha tomado manifestación en calidad de investigado a un vecino de Puebla de Alcocer (Badajoz),  por su supuesta implicación en un delito contra la fauna.

La Guardia Civil obtuvo cierta información, que hacía sospechar de la colocación de medios y artes prohibidos, al objeto de “proteger” explotaciones ganaderas, del supuesto ataque de fauna silvestre.

Con la ubicación de los lugares de la posible comisión de los delitos, la Guardia Civil estableció dispositivos de servicios e inspecciones para la localización de estas artes prohibidas; gestiones que resultaron laboriosas, dada el número y extensión de fincas recorridas.

Para ello, los agentes solicitaron el apoyo de canes adiestrados en la búsqueda de venenos y Agentes el Medio Natural.

En dos de las fincas inspeccionadas, se hallaron colocados en varios puntos estratégicos, un total de diez poteras (anzuelos) de las utilizadas para la pesca, colgadas mediante alambre desde varias encinas a un metro de altura y con sardinas a modo de cebo.

Los lugares de localización de dichas “trampas”, exteriores de naves ganaderas, e inspección ocular realizada, inculpaban al propietario del ganado, a quién se le tomó manifestación en calidad de investigado como supuesto autor de un delito contra la fauna.

Los agentes también localizaron una jaula no autorizada para la captura de zorros y restos de cadáveres de animales. Todas las artes tenían como finalidad la captura o muerte de animales silvestres.

El código penal castiga, con penas de hasta dos años de prisión, el uso de estas artes prohibidas, considerados medios no selectivos en lo referente a la captura de especies de fauna.